Del 5 de junio al 26 de octubre de 2008 hubo una exposición temporal en el Museo Romano de Lausanne Vidy titulada Les Murs Murmurent Graffitis Gallo-romains cuya información desgraciadamente me ha llegado tarde, pero más vale tarde que nunca. Además a través del conocimiento de esta buena exposición hemos aterrizado en una página muy bien trabajada de unos compañeros franceses.
Dice en francés, más o menos, Alix Barbet, en la revista Archeologia de julio agosto de 2008 , comentando esta muestra, lo siguiente:
"nada más ingrato que los graffitis: torpes, antiestéticos, fragmentarios y a menudo ilegibles, que han disuadido a generaciones de arqueólogos que han tenido que pelear por reconstruir los fragmentos caidos de las paredes y darles un sentido. Cuando se tratan de bocetos son más o menos deformes, y cuando son inscripciones, los epigrafistas habituados a escrituras más nobles sobre mármol o bronce los desprecian"
Bueno, este es un punto de vista, pero basta pasearse por los cientos de graffitis del CIL IV o rastrear con buen ojo las paredes de Pompeya, Herculano, Ostía, a título de ejemplo, para ver las enormes posibilidades que estos "rudimentarios" escritos tienen en nuestro trabajo día a día con los alumnos de Cultura Clásica y Latín y Griego. Os lo digo por experiencia, y también podéis preguntar a nuestro amigo Fernando.
Por lo que los profesores de secundaria podemos afirmar con toda garantía que no hay nada más grato que los graffitis.
A continuación disfrutad de unas cuantas fotos de lo que se pudo ver en dicha exposición, pero si queréis saber más acudid a Dossier des Latinistes o a la propia página de la exposición del Museo, o leeros el artículo de Alix Barbet en la revista Archéologia mencionado
Dice en francés, más o menos, Alix Barbet, en la revista Archeologia de julio agosto de 2008 , comentando esta muestra, lo siguiente:
"nada más ingrato que los graffitis: torpes, antiestéticos, fragmentarios y a menudo ilegibles, que han disuadido a generaciones de arqueólogos que han tenido que pelear por reconstruir los fragmentos caidos de las paredes y darles un sentido. Cuando se tratan de bocetos son más o menos deformes, y cuando son inscripciones, los epigrafistas habituados a escrituras más nobles sobre mármol o bronce los desprecian"
Bueno, este es un punto de vista, pero basta pasearse por los cientos de graffitis del CIL IV o rastrear con buen ojo las paredes de Pompeya, Herculano, Ostía, a título de ejemplo, para ver las enormes posibilidades que estos "rudimentarios" escritos tienen en nuestro trabajo día a día con los alumnos de Cultura Clásica y Latín y Griego. Os lo digo por experiencia, y también podéis preguntar a nuestro amigo Fernando.
Por lo que los profesores de secundaria podemos afirmar con toda garantía que no hay nada más grato que los graffitis.
A continuación disfrutad de unas cuantas fotos de lo que se pudo ver en dicha exposición, pero si queréis saber más acudid a Dossier des Latinistes o a la propia página de la exposición del Museo, o leeros el artículo de Alix Barbet en la revista Archéologia mencionado
1 comentario:
Magnífico post, Salva. Ni que decir tiene que estos graffiti los voy a utilizar en clase en cuanto pueda. Desde aquí animo a los profesores de clásicas a descubrir las inmensas posibilidades de los grafitos pompeyanos:
http://www.culturaclasica.com/colaboraciones/lillo/taller-grafitos-pompeyanos.pdf
http://www.culturaclasica.com/colaboraciones/lillo/taller-grafitos-amorosos-pompeya.pdf
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